FEMINISMOS… Y los viejos mirando obras…

He de reconocer que llegué al feminismo en la universidad, cuando a las aulas masificadas de la Facultad de Derecho empezaban a llegar más mujeres que hombres; y la igualdad, más que un derecho, era una lucha contra muchas barreras que parecían gigantes o molinos de viento…

Pasado ya más de medio siglo de mi vida, me reconozco un feminista algo atrasado; de paso corto y que ya no está en la cabeza de las manifestaciones. Sigo en la lucha, pero creo que con ideas algo académicas; según la RAE, el feminismo postula el «principio de igualdad de derechos de la mujer y el hombre». Algo que ha quedado muy antiguo, rancio y ramplón…

El movimiento feminista está vivo y ha ido agrupando en su lucha por transformar las relaciones sociales discriminatorias a muchos colectivos que son corrientes que convergen en un mar de esfuerzos por lograr la igualdad de todas las personas y acabar con cualquier violencia de género…

A día de hoy, y me congratulo, no hay un feminismo ortodoxo y puritano; el debate ahora son LOS FEMINISMOS abiertos y vanguardistas.

Ahora, a mi edad, me siento un feminista “conservador” (intento mantener los derechos que se ganaron) y mis pronunciamientos abolicionistas de la prostitución, y las dudas que me plantean las nuevas identidades de género, me van colocando, cada vez, más lejos de la cabeza de la manifestación; de la lucha y de los nuevos debates…

Es normal, soy viejo y lo reconozco; fui educado en la dureza vertical del patriarcado, y a veces, los muchos árboles “machos” formaban parte de un paisaje que parecía imposible de cambiar. Te alegrabas con cualquier pequeño cambio; nuestra lucha era reposada y lenta… Sobre todo, demasiado lenta… ¿Cuántas compañeras han quedado por el camino víctimas de una violencia machista de la que muchos hemos sido cómplices, o hemos mirado para otro lado…?

Entiendo que no estamos a la altura de los nuevos compromisos, de los nuevos debates, de las nuevas corrientes… A veces, somos rémoras a nuestro pesar…

Por eso, en el 8 de marzo del 2022, todo mi apoyo a LOS FEMINISMOS; a esa vanguardia luchadora que nos mira como a la señora de la limpieza… Somos compañeros, pero ellas aspiran a dirigir nuestra sociedad…